La práctica totalidad de residuos no se gestionanan en India: se queman o se llevan a vertederos en los que se degradan a cielo abierto, generando enormes cantidades de gases de efecto invernadero y contaminando el suelo y los acuíferos.
Esta planta de compostaje gestiona diariamente 200 toneladas de residuos urbanos de Delhi y los transforma en abono orgánico subvencionado, que ayuda a los agricultores de la zona a mejorar sus producciones y a aumentar la disponibilidad de alimento. Además pone en valor los residuos, generando oportunidades económicas y laborales, y la reducción de contaminación por quema mejora las condiciones sanitarias y ambientales de la comunidad.
Este proyecto y todas las compensaciones llevadas a cabo con él son gestionadas y supervisadas por Naciones Unidas.
Algunos beneficios adicionales de este proyecto son:
1
Genera puestos de trabajo directos e indirectos
2
Favorece la seguridad alimentaria y enriquece los suelos agrícolas
3
Mejora la calidad del aire y las condiciones sanitarias de las comunidades